La jueza penal de garantías del fuero especializado contra el crimen organizado, Rosarito Montanía, además de ordenar la reclusión de Gianina García Troche en la Cárcel Militar de Viñas Cué, impuso también una serie de medidas restrictivas en prisión.
La magistrada justificó su decisión por razones de seguridad y la necesidad de evitar posibles filtraciones, así como de precautelar incluso la seguridad de la procesada.
García Troche, esposa del prófugo uruguayo Sebastián Marset, fue extraditada el miércoles desde España bajo estrictas medidas de seguridad.
Luego de la audiencia de imposición de medidas cautelares, realizada en el Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi, la jueza Montanía resolvió enviar a la procesada a Viñas Cué, en respuesta a la vulnerabilidad del sistema penitenciario en Paraguay, especialmente en la cárcel de Minga Guazú, donde recientemente se registró una fuga, además de problemas de seguridad y altos niveles de corrupción
«Se decidió mandarla allí porque sabemos la situación penitenciaria de nuestro país. El penal de Minga Guazú tiene una alta tecnología, pero todos sabemos lo que ocurrió hace dos meses con la fuga de reclusos, y creo que hasta ahora siguen sin candados. Además, hay que tener en cuenta que allí está ‘Tío Rico’», explicó la magistrada a Monumental 1080
Estas son algunas de las medidas impuestas por el juzgado: Gianina García tendrá acceso a un teléfono monitoreado por las autoridades, provisto sin costo por la institución militar. Cada llamada, con un límite de 20 minutos, deberá ser registrada con su firma.
Las comunicaciones telefónicas se permitirán los lunes, miércoles y viernes, mientras que las visitas presenciales de familiares y abogados se autorizarán los martes, jueves y sábados.
La rutina incluye actividades de esparcimiento y salida al patio todos los días.
Actualmente, la Cárcel Militar de Viñas Cué alberga a 83 internos, en su mayoría agentes militares, aunque también hay civiles.
