La policía de automotores detuvo este martes a Claudia Gisell Guillén, auxiliar fiscal de la unidad de delitos económicos del Ministerio Público, quien se encontraba al mando de una camioneta Toyota Hilux de alta gama que había sido robada en Brasil.
Según el informe policial, la funcionaria se resistió a la intervención y se negó a mostrar la documentación del vehículo, que presentaba indicios de adulteración. Además, intentó huir del primer lugar donde fue retenida hasta que fue interceptada nuevamente sobre la Costanera Norte.
El fiscal de la causa, Oscar López, fue notificado del hecho y dispuso la liberación de Guillén, pese a las evidencias que la vinculaban con el robo del rodado. La policía cuestionó la actuación del agente fiscal.
El fiscal general dispuso la apertura de una causa administrativa sobre el caso de la funcionaria en posesión de un vehículo de dudoso origen: El Fiscal General, Dr Emiliano Rolón, emitió una providencia por la cual dispone la apertura inmediata de un sumario administrativo.
A raíz de la providencia del fiscal general del Estado, la Inspectoría General del Ministerio Público ya ha realizado el inicio del procedimiento administrativo, conforme a las atribuciones legales de la Ley Orgánica del Ministerio Público, quedando a las resultas del proceso.
