Wilfrido Cáceres, exhombre de confianza del intendente de Asunción, Óscar Rodríguez, acusado por enriquecimiento ilícito y otros delitos, recusó al juez Rodrigo Estigarribia. El acusado busca apartar al magistrado de su caso.
Hoy debía iniciarse la audiencia preliminar para el exdirector financiero de la Municipalidad de Asunción; sin embargo, ante la recusación contra el magistrado, la diligencia quedó frustrada.
En la causa también están acusadas su esposa, Ruth Da Silva; su secretaria, Camila Ramírez Gómez; y Elvira Gómez de Ramírez.
Los fiscales del caso, Silvio Corbeta y Luis Piñánez, presentaron acusación y solicitaron que la causa sea elevada a juicio oral, ya que consideran que las evidencias con que cuenta el Ministerio Público son sólidas.
En su momento, el Ministerio Público allanó la lujosa vivienda perteneciente al funcionario municipal Wilfrido Cáceres, quien se desempeñó como director de Administración y Finanzas durante la pandemia del COVID-19, y era considerado hombre de confianza del intendente Óscar Rodríguez.
Cáceres fue acusado por lavado de dinero y enriquecimiento ilícito tras detectarse que no existe correspondencia entre sus ingresos y los bienes adquiridos, los cuales intentó ocultar, según el Ministerio Público.
Su esposa, Ruth Da Silva, fue acusada por lavado de dinero, al igual que la secretaria Camila Ramírez. Ambas habrían simulado la compraventa del inmueble investigado, operación que realizaron de común acuerdo para ocultar a los verdaderos propietarios. Es decir, el matrimonio utilizó a una joven de 19 años como prestanombre para ocultar bienes que no podían justificar con sus salarios.
Según los antecedentes del caso, Ruth Da Silva compró dos terrenos en la zona de Costa Guasu, San Lorenzo, por el valor de 100 millones de guaraníes. De inmediato comenzó la construcción y, poco antes de culminar las obras, vendió el inmueble a su secretaria, Camila Ramírez, por la misma suma de 100 millones. Si bien la lujosa casa está a nombre de Ramírez, el matrimonio reside en el lugar con todas las comodidades ostentosas.
Según el relato fiscal, Wilfrido Adrián Cáceres Flores, casado bajo el régimen de comunidad de bienes con Ruth Jazmín Da Silva Almirón, presentó tres declaraciones juradas ante la Contraloría General de la República, correspondientes al periodo 2019 (22/03/2019) y 2021 (04/08/2021 y 24/11/2021).
Según lo determinado por la CGR, existe una inconsistencia patrimonial entre lo declarado y los datos obtenidos por la auditoría realizada, extremos que motivaron la realización de un análisis de correspondencia por parte del ente contralor, entidad que concluyó que no existe correspondencia entre todos los bienes declarados y los ingresos obtenidos tanto por Wilfrido Adrián Cáceres Flores como por su esposa, teniendo en cuenta el análisis patrimonial realizado por la Contraloría a partir de las declaraciones juradas cruzadas con la información obtenida de entes públicos y privados.
