El tribunal de sentencia presidido por la jueza Yolanda Portillo, rechazó todos los incidentes planteados por la defensa de los acusados Óscar González Daher y su hijo Óscar Rubén González Chávez.
La defensa buscaba la nulidad de la acusación fiscal y la prescripción que buscaban dejar sin efecto el proceso penal contra ambos.
Con esta decisión el juicio debe proseguir, en la siguiente etapa de producción de pruebas con la declaración de testigos.
La diligencia no podrá ser retomada, a raíz de que la presidenta del tribunal va a cuarentena por haber tenido contacto con un positivo por COVID.
La diligencia solo puede quedar en pausa por diez días y si no retoma vuelve a foja cero e incluso con otro tribunal.