El abogado Miguel Mendieta presentó un escrito pidiendo que todos los estudios realizados a Miguel Insfrán alias Tío Rico sean remitidos en físico y detallado incluso las imágenes producto de los estudios realizados al acusado quien fue dado de alta y devuelto al penal tras un episodio de salud.
La defensa busca acceder a los resultados en detalle ya que según refieren el informe médico no muestra detalles de los estudios practicados a Tío Rico cuando estuvo internado en el Hospital y desean acceder a estos informes a profundidad ya que no fueron entregadas a la familia y tampoco a sus abogados.
Para la defensa de Tío Rico si bien actualmente el procesado se encuentra estable, él no ha sido diagnosticado por lo que su vida sigue en riesgo y solicitan sea sometido a estudios más profundos para descartar o confirmar la sospecha de la defensa y que estas actuaciones sean todas realizadas bajo reserva.
Agrega el escrito que, el procesado se encuentra bajo un régimen muy riguroso de prisión preventiva coartando incluso la comunicación con sus abogados defensores por lo que solicitan a la jueza del caso libre oficio al Ministerio de Justicia recordando su libre comunicación.
Según la acusación fiscal, Miguel Ángel Insfrán Galeano lideraba uno de los núcleos del narcotráfico conformado por integrantes de su familia y gente de su confianza, por otro lado, estaba el núcleo liderado por el uruguayo Sebastián Marset y por último se encuentra la facción criminal extranjera, específicamente de Bolivia, la cual se encargó de proveer a las agrupaciones ilícitas unidas en Paraguay, la sustancia estupefaciente consistente en clorhidrato de cocaína.
“Para las remesas de cargas de cocaína, Sebastián Marset y Miguel Insfran contaron con la participación de varias personas físicas, también de distintas empresas con perfiles adecuados que no despierten la sospecha de riesgo por parte de la administración de Aduanas, dedicadas precisamente al comercio internacional, cuyos encargados, igualmente integrantes de la organización criminal”, relata la acusación del agente fiscal Deny Yoon Pak.
Durante los allanamientos realizados como parte de la operación «A Ultranza Py», se descubrió una amplia variedad de vehículos, incluyendo aeronaves, automóviles de lujo y camiones de gran porte, todos ellos equipados con dobles fondos para el transporte de mercancía ilícita. Además, se encontraron depósitos de gran tamaño ubicados estratégicamente en el departamento Central, cerca de puertos.
La causa respecto a diez personas ya fue elevada a juicio oral incluyendo a Tío Rico, la fecha de juicio oral respecto a nueve acusados fue fijada para el 24 de febrero del 2025.