La cámara de apelaciones confirmó la elevación de la causa a juicio oral y público para Miguel Insfrán alias Tío Rico, acusado por la fiscalía de liderar una estructura criminal de tráfico internacional de droga.
Alzada, incluyó los testigos que no fueron aceptados por la jueza del caso Rosarito Montanía, para quien no era pertinente los testimonios para aclarar los hechos, sin embargo, para el voto en mayoría de alzada si resulta pertinente la inclusión de los testigos que ofrece la defensa y los incluyó para el juicio.
Los testigos de Tío Rico admitidos para el juicio oral son: Manuel Doldán fiscal adjunto, José María Sosa Duarte secretario general del Ministerio de Justicia, Marta García Belloso secretaria del Ministerio del Trabajo y Josué Samudio un asistente fiscal.
Según la acusación fiscal, Miguel Ángel Insfrán Galeano lideraba uno de los núcleos del narcotráfico conformado por integrantes de su familia y gente de su confianza, por otro lado, estaba el núcleo liderado por el uruguayo Sebastián Marset y por último se encuentra la facción criminal extranjera, específicamente de Bolivia, la cual se encargó de proveer a las agrupaciones ilícitas unidas en Paraguay, la sustancia estupefaciente consistente en clorhidrato de cocaína.
“Para las remesas de cargas de cocaína, Sebastián Marset y Miguel Insfran contaron con la participación de varias personas físicas, también de distintas empresas con perfiles adecuados que no despierten la sospecha de riesgo por parte de la administración de Aduanas, dedicadas precisamente al comercio internacional, cuyos encargados, igualmente integrantes de la organización criminal”, relata la acusación del agente fiscal Deny Yoon Pak.
Durante los allanamientos realizados como parte de la operación «A Ultranza Py», se descubrió una amplia variedad de vehículos, incluyendo aeronaves, automóviles de lujo y camiones de gran porte, todos ellos equipados con dobles fondos para el transporte de la mercancía ilícita. Además, se encontraron depósitos de gran tamaño ubicados estratégicamente en el departamento Central, cerca de puertos para facilitar la carga y posterior salida del país de la droga.
Este operativo contó con la colaboración de la DEA, de la policía de Uruguay de la Europol, la SENAD con lo que el Ministerio Público puso cerrar el caso.
Actualmente Miguel Insfrán se encuentra cumpliendo prisión preventiva en el penal de máxima seguridad de Minga Guazú.