El juez Miguel Palacios, a través de un exhorto, solicitó a la justicia argentina que disponga la detención con fines de extradición de Mariángela Abdala y Giselle Noemí Ferrer, imputadas por daños a bienes del patrimonio cultural y otros delitos.
Abdala y Ferrer, están prófugas de la justicia luego de los actos vandálicos en el Panteón, y luego fueron detenidas y luego liberadas en Argentina tras una violenta manifestación frente a la Embajada de Paraguay.
La liberación de estas, en su momento, generó una ola de críticas al trabajo de Interpol, que por un error de control de ficheros no envió a tiempo una difusión roja en contra de las citadas mujeres.