El juez especializado Rodrigo Estigarribia convocó para el 23 de diciembre a las 09:00 al fiscal Bernardo Javier Elizaur Aguirre, quien enfrenta un proceso penal tras un operativo de entrega vigilada llevado a cabo por el Ministerio Público en el marco de una investigación por presunta solicitud de soborno.
Elizaur, fiscal de la Unidad Penal de Emboscada, fue imputado por cohecho pasivo agravado luego de ser denunciado por exigir 10 millones de guaraníes para beneficiar a un procesado por lesión grave. La imputación fue presentada por la fiscal especializada en Delitos Económicos y Anticorrupción, Yeimy Adle.
Según la investigación, el pedido de dinero habría sido canalizado mediante mensajes de texto enviados por su asistente fiscal, Lilian Andrea Florenciano, a la abogada defensora. A cambio del pago, supuestamente se ofrecía no presentar acusación formal y facilitar una salida procesal favorable para el imputado.
De acuerdo con la denuncia, al no concretarse el pago, el fiscal procedió a presentar la acusación. Posteriormente, se habría formulado un nuevo pedido de dinero, esta vez por un monto menor, con la promesa de allanarse a una suspensión condicional del procedimiento. Estos hechos motivaron la intervención de la Unidad Anticorrupción.
Tras la denuncia, el Ministerio Público organizó una entrega vigilada en la propia sede fiscal. Los billetes fueron fotocopiados y los agentes acompañaron la transacción. El operativo derivó en un allanamiento, durante el cual fueron incautados teléfonos celulares, CPUs y dinero en efectivo. La oficina del fiscal quedó clausurada como parte de las diligencias.
La asistente fiscal Lilian Florenciano fue imputada como cómplice del hecho punible.
En conferencia de prensa, Elizaur sostuvo su inocencia y afirmó haber sido “engañado” por su asistente, a quien atribuyó la presunta negociación irregular del expediente.













