Muchas mujeres, madres paraguayas, fueron privadas de ejercer su maternidad a causa del feminicidio.
Muchos niños no podrán dar ese abrazo a sus mamas por el día de la madre este 15 de mayo. Uno de los casos que aún no pueden resolverse, pero todo apunta a un feminicidio, es el caso de Dahiana Espinoza.
Dahiana Espinoza, una joven madre de 21 años, está desaparecida desde hace ocho meses. Fue madre a los 16 años y es por lo que se esforzaba día a día para que no le falte nada a su hijo, a quien adoraba. Renunció a sus estudios para vender carne de manera informal por la zona de J. Augusto Saldívar, y le iba muy bien.
Su hijo de cuatro años siempre estaba pendiente de la puerta a la hora que generalmente Dahiana solía llegar del trabajo, con algún dulce o juguete de regalo. “¿Por qué no viene mi mamá de su trabajo?”, pregunta el pequeño a sus abuelos, sin entender lo que pasa, pero extrañando los mimos que le hacia su madre.
“Mi hija era una madre muy cariñosa con su hijo. Le adoraba. Era todo para ella”, contó Juan Espinoza, padre de Dahiana, quien no se resigna a no saber nada de la joven.
ANTECEDENTES DEL CASO
Dahiana Espinoza está desaparecida desde el pasado 18 de septiembre, día en que una amiga la dejó frente a su casa en Itá, donde vivía con su pareja Joel Guzmán Amarilla, principal sospechoso de un posible caso de feminicidio.
Existen varios elementos que hacen presumir a la fiscalía que fue asesinada por su pareja. Durante la verificación de la posible escena del crimen, se encontraron rastros de sangre humana en el baño de la casa de la pareja, el teléfono celular de la joven estaba en poder de su suegra con los datos eliminados y una fotografía de Dahiana que Joel había levantado en su estado del WhatsApp por error el día de su desaparición, pero que fue vista por una amiga de Dahiana. En la imagen se ve parte del cuerpo de Dahiana, borroso, pero aparentemente en el suelo.
VERSIÓN DEL SOSPECHOSO
Joel Guzmán Amarilla relató ante la fiscal Daisy Sánchez que Dahiana supuestamente salió durante la madrugada, abordó un vehículo y nunca más se supo de ella. Al día siguiente realizó la denuncia por la desaparición y como su versión no convenció a la policía, el hecho comenzó a ser investigado. Fue imputado por violencia familiar ya que varios testigos confesaron que Dahiana fue víctima de agresiones físicas y verbales por parte de su pareja.
En una oportunidad, Joel Amarilla habría dicho a los policías que lo custodiaban que había matado a Dahiana y ocultado su cuerpo en un pozo de la J. A Saldívar. Es por eso que se verificaron cerca de diez pozos de la zona, además de las cámaras sépticas, pero sin resultados.
PRUEBAS CIENTÍFICAS
Las muestras de sangre levantadas de la vivienda de la pareja donde se presume que ocurrió el asesinato, coinciden en un 99,9% con ADN de los padres. Es decir, son de Dahiana. Sin embargo, hasta la fecha, el caso aun no fue caratulado como feminicidio pese a todas estas evidencias.
A esto se suma que se encontraron un cuchillo, un serrucho y un hacha, elementos que dieron positivo a sangre humana.
Está, además, en la mira de la fiscalía, César Brítez, el ex jefe de la joven, propietario de una carnicería y de una matadería en Itá.
En lo que va de este 2021, Paraguay registra unos seis casos de feminicidio, en su mayoría de madres, según datos del Ministerio Público.